Si deseas ejecutar Windows en tu Mac sin recurrir a Boot Camp, este artículo te será de gran utilidad. Muchos usuarios buscan una integración fluida y eficaz de ambos sistemas operativos.
El proceso de instalar Windows sin Boot Camp requiere una preparación cuidadosa. Prepárate para posibles problemas, pero también anticipa la versatilidad que conseguirás con tu Mac.
Preparando tu Mac para la Instalación
Para ejecutar Windows en tu Mac sin Boot Camp, seguiremos estos pasos que revisaremos en detalle más abajo:
- Consigue una unidad USB con al menos 64 GB. Esto se utilizará para crear un instalador de Windows arrancable.
- Obtén una ISO de Windows 10 y asegúrate de tener una licencia para la activación.
- Descarga los controladores de Boot Camp, aunque no utilices Boot Camp Assistant. Estos controladores son necesarios para que el hardware de tu Mac funcione con Windows.
- Usa EaseUS OS2Go para convertir tu unidad USB en una plataforma portátil de Windows.
- Asegúrate de que tu Mac tenga al menos 30 GB de espacio libre para instalar Windows.
- Utiliza Utilidad de Discos para particionar el disco duro de tu Mac. Reserva espacio para Windows y formatéalo correctamente para la instalación.
- Con tu unidad particionada y tu USB arrancable preparado, puedes arrancar desde el USB y comenzar el proceso de instalación de Windows.
Obteniendo el Archivo ISO de Windows
Para configurar Windows en tu Mac sin usar Boot Camp, comienza obteniendo un archivo ISO de Windows desde el sitio web de Microsoft. Este archivo es crucial; contiene la configuración completa de Windows y se puede trasladar a una unidad USB u otro medio de instalación.
Para una descarga sin problemas del ISO de Windows, recuerda:
- Elige la versión correcta:
- Ya sea Windows 10 o Windows 11, dependiendo de lo que funcione con tu Mac.
- La mayoría de las Mac basadas en Intel utilizarán la versión de 64 bits.
- Las Mac con Apple Silicon necesitarán la versión basada en ARM, aunque esto no está oficialmente soportado.
- Pasos de descarga:
- Ve al sitio web de Microsoft.
- Encuentra la sección de descargas de Windows.
- Elige la edición y el idioma del ISO de Windows.
- Verifica y guarda:
- Ten una licencia válida de Windows.
- Confirma que el archivo ISO sea genuino e intacto.
- Guarda el archivo de forma segura para futuros usos.
Creando la Unidad USB Booteable
Para crear una unidad USB booteable de Windows en tu Mac sin usar Boot Camp, descarga e instala una herramienta como EaseUS OS2Go. Simplifica la creación de una memoria USB de Windows capaz de arrancar desde la partición EFI de una Mac.
Inserta una unidad USB con al menos 64 GB de espacio en tu Mac. Inicia EaseUS OS2Go y selecciona tu unidad USB como destino para el sistema operativo Windows.
El proceso es sencillo:
Paso | Acción |
---|---|
1 | Selecciona la Unidad USB |
2 | Formatea la Unidad USB |
3 | Copia los Archivos de Windows |
4 | Configura para el Arranque EFI |
EaseUS OS2Go formateará tu unidad USB y establecerá las particiones necesarias. Sigue las indicaciones para trasladar los archivos de Windows a la unidad USB. Después de completar esto, tendrás una unidad USB arrancable para la instalación de Windows.
Para iniciar la instalación, reinicia tu Mac, mantén presionada la tecla Option para acceder al administrador de arranque y elige la opción de arranque EFI.
Particionando el Disco Duro de tu Mac
Inicia Utilidad de Discos en tu Mac y selecciona el disco que planeas particionar para la instalación de Windows. Como usuario de Mac, crearás una partición en el disco duro interno de tu Mac específicamente para Windows, manteniendo intacta tu partición actual de macOS. Esto es crucial para ejecutar ambos sistemas operativos en tu Mac de manera independiente de Boot Camp.
Así es como puedes particionar el disco duro de tu Mac:
- Selecciona ‘Partición’
- Haz clic en el ícono más (+) para agregar una partición
- Asigna al menos 30 GB a la nueva partición
- Etiqueta tu partición, por ejemplo, ‘Windows’
- Para que el instalador de Windows la reconozca, formatea la partición como ‘MS-DOS (FAT)’
Una vez que hayas nombrado y formateado la partición, confirma los cambios. Tu Mac creará la nueva partición, protegiendo la configuración actual de macOS.
Instalando Windows en tu Mac
Después de configurar una partición dedicada en el disco duro de tu Mac para Windows, estás listo para instalarlo. Necesitarás una unidad USB con al menos 64 GB de almacenamiento para servir como instalador de Windows arrancable. Herramientas como EaseUS OS2Go pueden ayudarte a crear este instalador.
Comienza conectando la unidad USB arrancable en el puerto USB de tu Mac. Luego, reinicia tu Mac y presiona y mantén presionada inmediatamente la tecla Option para abrir el administrador de arranque. Aquí encontrarás diferentes opciones de arranque, incluyendo EFI Boot, que corresponde a tu instalador USB de Windows. Elíjelo para iniciar la instalación desde la unidad USB.
Las instrucciones en pantalla te guiarán a través de la configuración de Windows. Cuando se te pida elegir una ubicación de instalación, selecciona la partición que has creado para Windows. Esto asegura que la instalación no interfiera con el macOS existente de tu Mac.
Después de instalar Windows, actívalo con una licencia válida. Dado que no estás utilizando Boot Camp, deberás descargar los controladores de Boot Camp compatibles con tu Mac para asegurarte de que todo el hardware funcione correctamente.
Conclusión
Después de completar los pasos de preparación y obtener la ISO de Windows, has creado con éxito una unidad USB arrancable.
Tras la partición del disco duro de tu Mac, ahora tienes Windows instalado junto con macOS y puedes cambiar entre sistemas operativos sin esfuerzo. Aprovecha al máximo las funciones ampliadas de tu Mac.